
Hace muchos años un muchacho se enamoró de una bella joven,
pero al pedirla en matrimonio,
ésta le dijo que su hada madrina le había puesto una condición :
Se casaría con quien fuera capaz de hacer un agujero en el agua.
Eso es imposible! -dijo el joven.
Mi hada madrina me ha asegurado que quien de verdad me ame, lo logrará.
El enamorado pensó y pensó y anduvo por muchos lugares en busca de una solución.
Hasta que llegó a las tierras frías del norte y al ver un lago que estaba helado comprendió que ahí se podía hacer un agujero en el agua.
Gracias a eso se casó con su amada y fueron muy felices.